17/08/2016

No mezclemo$ el Deporte con l@ Poít!c@

 Sobre las Olimpiadas de Rio mucho se puede dudar. Me gustaría hablar de la situación política y económica de contrastes brasileña, pero me temo que no tengo información suficiente para hacer un artículo con fundamento sobre ello, evidentemente son escasos los medios de comunicación que se hacen eco de esta situación preocupante. Ahora bien, no nos quedamos cortxs ¡eh! Hablaremos del machismo, la homofobia y la transfobia en los JJOO y en algunos medios de dudosa comunicación que los cubren, y que desgraciadamente de esto si se hacen eco, es más, participan muy activamente.


Empezamos por el medio (esta vez no por el principio… A pesar de que no sé qué pensaría de mí el sombrerero loco…): la homofobia. Las mujeres que aman a otras mujeres, es decir las lesbianas, lo saben perfectamente, para muchos medios de comunicación son invisibles. Un ejemplo lo pondría cierta basura panfletaria: El periodista digital. Este diario de dudosa fiabilidad calificaba de amistad, el noviazgo de la deportista Isadora Cerullo (os dejo el enlace: http://www.periodistadigital.com/24por7/otros/2016/08/09/a-la-jugadora-de-rugby-le-hace-propuesta-de-matrimonio-su-amiga-al-terminar-el-partido.shtml) y su novia/chica/pareja/pareja mujer lésbica, como de amistad ¡Olé tus huevos! ¡Amistad! Reproduciría un mensaje que hacen las mujeres feministas lesbianas en dichos casos, pero como les queda muchísimo mejor a ellas me callaré y solo diré que sí, amigas serían ¡Pero antes serían novias! ¡¿No?! ¡Vaya! ¡Digo yo! Es decir, a mí no me viene ningún amigo a pedir matrimonio después de un examen de neumología, quizá es porque soy un tanto rococó pero tampoco me hagáis mucho caso… En cuanto a los gais tampoco nos quedamos cortxs, pues resulta que un “periodista”, el tal Nico Hines “el anginas” (esto me lo invento yo, porque a pesar de que me las extirparon, leer a este señor me las regenera y reinfecta), decidieron, él y su miembro viril que además usa de cerebro desde que nació, hacerse una cuenta en una aplicación (sobre la cual hablaremos en el futuro: Grindr) orientada a cierto tipo de público gay (solo de hombres, y en general homonormativo). Ya sabéis, el típico hombre heterosexual, blanco, cisgénero, sin diversidad funcional que hace el imbécil. Y como  “el anginas”, solo piensa con su miembro, es decir, con su pene, pues decidió “sacar del armario” a atletas de los JJOO que eran gais pero no lo habían hecho público (aunque solo deban hacerlo si les da la gana ¡Claro!), y hacerlo público, él y su pene (perdonadme pero es que esto me pone de mala leche) ¿Se puede ser más imbécil? ¿Verdad que no? Y es que uno se preguntaría que qué podríamos esperar un hombre heterosexual que ni idea tendrá sobre ningún tipo de armario… El tema se describe solo, así que poco tengo que comentar de más.
 
Sara Robles: "Y tú, ¿Cuántas medallas tienes?"
Seguimos con el machismo. Aquí podríamos hablar largo y tendido también, os adjunto también el enlace de un artículo sublime de Barbijaputa:  http://www.eldiario.es/zonacritica/JJOO_Rio_2016-machismo-barbijaputa_6_548455155.html, ya que os anticipo lo que sospecharéis, con el machismo podríamos durar años hablando. Mas el planteamiento que llevan los medios de comunicación patriarcales se centra en recordarle a la mujer su situación subordinada al hombre. En primer lugar, una mujer siempre debe estar guapa y arreglada para gustar al hombre. Es imprescindible, y por ende, sus medallas dan bastante igual. Puede ser una trabajadora sin igual en su ocupación que no es otro que el deporte, puede que se levante todos los santos días a las 5 de la mañana para entrenar, que a ciertos periodistas, solo les importará su culo, sus tetas, o si es más trasgresor: sus labios (http://www.elmundo.es/album/loc/2016/08/02/579f6d73ca474150768b45d4.html). En segundo lugar está el tema de sus vestimentas. Esto ocurrió en un partido de voleibol-playa entre Egipto y Alemania si no estoy equivocado. Pues pasó lo de siempre, los hombres, nos ponemos a hablar de lo que no sabemos. Así unos criticaban que las mujeres egipcias fuesen casi tapadas, y otros que las alemanas fueran semidesnudas. Comparando el traje femenino de voleibol-playa con el masculino, vemos que el masculino es muy tapado y el femenino, básicamente no ¿Casualidad? Lo dudo. Y claro, cuando vienen las mujeres egipcias, en vez de preguntarles qué piensan al llevar ese (es como un traje negro con el uniforme reglamentario encima, lo veréis en este enlace: http://www.lavanguardia.com/deportes/olimpiadas/20160808/403785852484/choque-culturas-voley-playa-femenino-egipto-alemania-rio-2016.html) uniforme, les callamos la boca (porque seamos sinceros, son mujeres y como patriarcales solo nos interesa la opinión de otro hombre y heterosexual y blanco si es posible) y hablamos nosotros. En tercer lugar ¡con la gordura hemos topado! (otro enlace: http://www.publico.es/deportes/derecho-gordos-olimpicos.html; este es diferente, ¡no os quejaréis!). Y es que con la gordura no se puede hacer nada… A los medios de comunicación mamelucos, los cuerpos diversos les dan lo mismo, por una simple razón, porque a la gordofobia se le cae el mito de que todxs lxs gordxs somos vagxs, no hacemos deporte y solo comemos ¡¿Qué más dará que una gimnasta represente a mi país y lo haga excelentemente?! ¡Por el amor de Dios! ¡Está gorda!
Y ya acabo el tema del machismo, aunque podría seguir muchísimo más, con el caso de Maialen Chourraut (más enlaces: http://www.20minutos.es/deportes/noticia/maialen-chourraut-madre-campeona-olimpica-2816090/0/). Esta mujer, a parte de ser medalla de oro en piragüismo, es madre ¿Por qué todos los medios sacan que es madre? Sí, es cierto, lo ha dicho ella misma ¡porque en su derecho está de serlo y estar orgullosa de ello! ¡Faltaría más! No obstante tú, como periodista deportivo ¡No saques en el titular que también es madre! ¡Sí dilo, pero no en el titular! ¡Estás escribiendo una noticia DEPORTIVA no FAMILIAR! Y eso quiere decir que las cuestiones familiares, a pesar de ser muy importantes, tienen menos peso que sus logros olímpicos. Pondré un ejemplo: si voy al hospital porque desde hace 3 días tengo diarrea, primero le hablaré alx medicx de mi dieta, y luego, ya si tengo tiempo, le cuento qué opino sobre los bolígrafos de tinta líquida. Porque tu opinión sobre los bolígrafos de tinta líquida es importante ¡Pero por el amor de Dios! ¡Explícale al médico qué has comido primero! ¿No? Pues eso…
 
Semenya, una ídolo para muchxs
Y acabo esta vez sí, por el final, la transfobia. Y abro un importante paréntesis para recordar a Hände Kader, activista trangénero LGTBI/GSRDI brutalmente asesinada esta misma semana. Yo nunca la conoceré ni podré saber de su propia boca su historia, y aunque seguramente jamás la hubiera conocido, porque en nuestro precioso planeta vivimos muchísimas personas, me gustaría precisamente que supieseis como he sabido yo, de ella (http://www.express.co.uk/news/world/700386/Transgender-woman-killed-Turkey-burnt-mutilated-LGBT-rights), para así no olvidarnos de la lucha de las personas transgénero y transexuales.
Ahora ya sí, pasando directamente al asunto uno se pregunta: ¿qué ocurre con las personas trasngénero o de género no binario deportistas? Y es que en los JJOO no hay cabida para personas de género no binario, o eres hombre o eres mujer, no hay nada más. Mas sí que lo hay ¡Y tanto que lo hay! Y ¿qué pasa? Esas personas, por obligación, tienen que odiar el deporte o ser malxs en el mismo. Sin embargo quizá estoy planteando temas radicales ¡No hace falta ser transgénero o tener un género no binario para que te cuestionen tus capacidades! Resulta pues, que si una mujer no es lo suficiente femenina por tener una concentración “anormalmente” alta de testosterona, como es el caso de la atleta Cater Semenya (http://www.economist.com/blogs/economist-explains/2016/08/economist-explains-10), o ser como la española Mª José Martínez Patiño, nacida con cariotipo 46, XY (normalmente típico del hombre), pero nacida mujer por tener SIA (Síndrome de insensibilidad a los andrógenos, es decir, la testosterona). Me parece increíble y casi comparable a una especie de apartheid de género u hormonal. Es decir, que si tú sobrepasas una cierta concentración de testosterona ya no puedes competir con las mujeres aunque lo seas, ahora bien, si eres hombre y tienes más testosterona: ¡la naturaleza que es muy sabia! Además de que es completamente reduccionista considerar que la testosterona es el único componente de la fuerza o agilidad muscular de los seres humanos, simplemente es ridículo. Ah, pero una cosa es considerar que las mujeres deben tener menos testosterona y otra cosa es universalizar su uso ¿Por qué no dividen las categorías en vez de entre hombre o mujer entre concentraciones de testosterona? Como hacen con los pesos en halterofilia o boxeo ¿No? ¡Ah, claro! Pues porque sería humillante que un hombre competiese con una mujer por el mero hecho de tener la misma concentración de testosterona o similar…


En fin, sé que me dejo varias cosas en el tintero, como profundizar en el tema de la gordofobia, la diversidad de los cuerpos y la cuestión racial, pero quería hacer un artículo centrándome en esos temas que ya comenté al principio del escrito. Y seguramente, tras leerlo junto con los artículos que os he adjuntado, coincidiréis  conmigo en que las mujeres, las personas transgénero o con masculinidades y feminidades diversas, y con diferentes orientaciones sexuales, no tienen las mismas consideraciones que lxs demás.

En cuestiones, sobretodo relacionadas con el futbol y la independencia de Catalunya (por el tema de los pitidos al himno por parte de lxs catalanxs en la Copa del Rey y esas cosas que ahora no interesan mucho), se dice que no mezclemos la política con el deporte. Desgraciadamente uno ha escuchado aquello que dicen las feministas de “lo personal es siempre político”, así que si ellos empiezan con su política discriminatoria, nosotrxs seguiremos reivindicando las igualdades. Si no quieren política en los JJOO, que no empiecen ellos con su machismo, LGTBI/GSRDIfobia, racismo, gordofobia y transfobia. Avisados quedan.