16/10/2020

La revoluc!ón Intersex

Hace poco más de un año escribía sobre la asexualidad como orientación sexual más olvidada, como eje propio de significación contrario a lo alosexual y más cercano a lo grisosexual (1); una pura declaración de intenciones contra el binarismo. 

Lo intersex nunca había sido objeto de discusión en este blog y eso debía acabar (2). Como persona cisgénero marica estoy atravesado por diferentes ejes de privilegio. La masculinidad, aun con mi expresión de género, identidad cisgénero, no estoy racializado y tengo cierta estabilidad en mi trabajo. Son privilegios que se deben tener en cuenta antes de leer este blog, todxs estamos atravesadxs por más o menos privilegios, reconocerlos es el primer paso para romper las opresiones. Y una de las opresiones más olvidadas es la de nacer con un sexo no binario; debemos reconocer el privilegio que conlleva nacer y que se te respete tu sexo cuando es normal (en el peor de los sentidos de la palabra que si sois lectores habituales de este blog ya sabéis que suele tener este término), normosexual, binario.


El fin de las teorías queer y los orígenes de la crítica a la normalidad sexual.

Soy de lxs que piensa que para entender las teorías queer hace falta estudio sobre estudio. No obstante, algo queda claro, no es una teoría normativista (3) ni con un origen claro. Cuando lxs pensadorxs de estas teorías y sus ramas declaran que no es normativista indican que su objetivo no es el de establecer una normalidad nueva que dé soluciones sencillas a toda una maraña de situaciones de poder, sino enunciar que la actual es insuficiente y deja a muchas personas disidentes fuera de la vida. Mediante el  estudio de nuevas formas de pensar para que las personas con identidades, géneros, orientaciones, expresiones y sexualidades atravesadas, como no podría ser de otra forma, por numerosas intersecciones de opresión perciban que su vida merece la pena ser vivida, tratan de realizar su labor. Y esto es revolucionario.

La imposición sexual es tu ideología de género reaccionaria.

Conociendo los objetivos de las teorías queer queda por recalcar que su finalidad no es la imposición, para eso ya tenemos a otros.

Desde los estamentos jurídicos, eclesiásticos y desgraciadamente todavía también médicos al estar dominados por la masculinidad cisheterosexual blanca hegemónica desprecia las minorías con numerosas herramientas. Una de ellas ha sido y continúa siendo la denominada ideología de género: una simplificación de las teorías queer así como de la lucha feminista. Con la cantidad de pluralidad de ideas y teorías dentro de estos movimientos tratar de simplificarlos solo puede ser intención de alguien que no desea entender que hay más variedad dentro de la humanidad que sus propias experiencias y que no hacen otra cosa más que no se enriquecernos a todxs. 


Los más de 6 espectros de la sexualidad humana binaria (4).

Habitualmente en el blog hablo de orientaciones, identidades, expresiones y sexualidades que son los estamentos fundamentales que componen la sexualidad humana. Me parece no obstante imprescindible desarrollar otras que se plantean desde la academia para describir al binarismo que creo que hará entender eficazmente el significado de esta palabra o ideología política. 

Comenzamos con los cromosomas sexuales, el cariotipo, la genética. El arcaico binarismo XX y XY es sustituido por la medicalización, estigmatización y por tanto patologización de otras variantes clasificándolas de síndromes. Poca significación tendrán los cromosomas sin unas hormonas que desarrollen o no caracteres sexuales, pero de nuevo la teoría cojea al entrar términos como concentración en sangre (cantidad de hormona). Seguimos con la genitalidad o sexualidad externa e interna. Variantes del pene y escroto que contiene testículos así como de la vulva, vagina, clítoris y ovarios: carencia de gónadas, alteraciones en su localización. Pasamos a la conformación de los caracteres sexuales secundarios influenciados por hormonas secretadas por gónadas pero también por otros órganos no incluidos en el apartado anterior e independiente de los caracteres sexuales primarios. Lo que en el imaginario de los políticos sexuales binarios expresan como diferencias secundarias: barba, nuez de Adán, senos, distribución de la grasa corporal en ginoide o androide, anchura de caderas y hombros… Atributos que son variables dentro incluso de la misma persona y que el binarismo más arcaico todavía cree poder mantener. Ya no es cuestión de necesidad de hablar de identidades trans o intersex, dentro del espectro cis tenemos hombres lampiños con distribución de la grasa ginoide y concentraciones de estrógenos mayores, por poner un ejemplo claro y rudimentario. Y acabamos con los que solemos comentar más a menudo en el blog: identidad, expresión o rol de género, género registrado y orientación sexual.


Cuando las excepciones son mayores que la regla, invertir conceptos es lo más sensato.

El binarismo es insostenible, es una ideología destinada a morir. Es evidente que muchas personas somos más o menos binarias para ciertos espectros pero la gradación debe ser planteada como método para hacer que la vida de muchas personas merezca la pena ser vivida. Sea vivible (5). Si es que ¡incluso! ¡hay quién su identidad de género se entremezcla con su orientación sexual! ¿Cómo se va a sostener el binarismo?

Pero vayamos al quid de la cuestión, el objetivo de este artículo era introducir las identidades intersex ¿qué opresiones les atraviesan? ¿Dónde quedan ellxs en el binarismo político? ¿Son visibles? 

Las personas intersex están atravesadas por ejes de discriminación de mayor dureza que el diamante, hablamos de violencia quirúrgica, endocrinológica y psicológica, hablamos de invisibilización, hablamos de paternalismo y ausencia de libertad para el propio cuerpo, hablamos de invisibilidad, hablamos de lxs mayores responsables de demostrar que el binarismo sexual político no les incluye y por ende hablamos de patologización.

Las teorías queer son sin duda un nido de oportunidades para lograr una vida y sociedad que incluya y cuide a las personas intersex, gracias a la dotación de significación de géneros fluidos y agéneros, orientaciones sexuales diversas, sexualidades, en resumen, diferentes a la normalidad.


No lo llames binarismo, llámalo imposición cisheterosexual.

Y nadie lo sabe mejor que el colectivo intersex. Sabemos de primera mano la violencia quirúrgica que en en las mayoría de países todavía se permite en justificación a un mejor encaje y menor supuesta estigmatización de estas personas incluso cuando son criaturas y no pueden decidir. Desde el activismo gordo sabemos de primera mano que la salud mental no se relaciona con la cantidad de grasa corporal por fenómenos intrínsecos si no por foráneos, por la discriminación, por la gordofobia. Quizá aspirar a una sociedad más vivible implica retrasar decisiones sobre tercerxs para que sea su sujeto quién las tome.

Introduzco el término quizá, la duda, porque no soy intersex. No estoy atravesado por sus opresiones, es más, las ejerzo. Es, por consiguiente, fundamental conocer las opiniones directas de lxs activistas intersex. Mientras el argentino intersex trans Mauro Cabral (6) y la francesa M. (7) condenan y califican como violencia quirúrgica a las intervenciones de identificación de género binarias el activista intersex marica Gabriel Martín (8) concreta la violencia quirúrgica a lo estético pero recalca la importancia de los equipos médicos multidisciplinarios plasmados en documentos como el Consensus de 2006 (9) y cuestiona la importancia de estas intervenciones con motivos preventivos de complicaciones a largo plazo como el el ejemplo de la ausencia de la migración de los testes hacia el saco escrotal por el conducto inguinal que hace que permaneciendo en el abdomen puedan incluso malignizar. También relata sus experiencias con la hormonación ante la extirpación de sus gónadas la cual depravación hubiera estado relacionada con aparición de otros síndromes como osteoporosis, astenia y disminución de la libido.

Desde luego no soy quien para criticar preceptos que no he vivido. Y como médico critico el paternalismo que hoy todavía entorpece el empoderamiento de lxs pacientes y usuarixs de los sistemas sanitarios; quizá una medicina familiar y comunitaria pueda encauzar estas discusiones. De nuevo quizá.


En su ensayo Una introducción a las teorías queer, Lorenzo Bernini nos abre el melón queer hacia lo intersex como yo al menos nunca me había cuestionado. Lo queer se cuestiona modos de hacer una sociedad más vivible, es posible que en numerosas ocasiones hierre pero es también cierto que podría plantear un nuevo imaginario para muchas personas que sufren, entre ellas muchas personas intersex. Conociendo casos como el de David Reimer y la contraposición de Gabriel Martín te hace ver los grises desde un lado oscuro como el de la medicina paternalista que obvia la opinión de la persona usuaria por ser una criatura todavía pero que se cree con derecho de decidir mediante familiares desinformados aunque con buenas intenciones y el lado luminoso de una medicina que va evolucionando y que debe empedrar y solicitar un consentimiento explícito para la persona usuaria que desee modificar su cuerpo por motivos estéticos y psicosociales y no preventivos biológicos.

Solo espero que este artículo sirva a modo de granito de arena para la revolución que están llevando a cabo las personas intersex, que según M. es y será íntima, política, social pero en ningún caso invisible (7).



1) http://coletines.blogspot.com/2019/07/breve-introduccon-sobre-el-prvlego.html

2) http://coletines.blogspot.com/2016/08/no-mezclemo-el-deporte-con-l-poitc.html

3) Bernini Lorenzo, Las teorías queer una introducción

4) Fausto-Sterling Sexing the Body, 2000

5) Butler Judith, deshacer el género, 2004 

6) https://www.pikaramagazine.com/2010/11/%e2%80%9cla-cirugia-recuerda-al-intersex-que-tuvo-que-ser-modificado-para-poder-ser-amado%e2%80%9d/

7) https://www.pikaramagazine.com/2020/07/la-revolucion-intersex-sera-intima-social-politica/

8) https://www.pikaramagazine.com/2010/11/%e2%80%9csi-me-hubieran-operado-al-nacer-hubiera-tenido-mas-calidad-de-vida%e2%80%9d/

9) https://pediatrics.aappublications.org/content/118/2/e488