Andrea
Levy, esa diputada del PP en el Parlament de Catalunya, lo ha vuelto a hacer.
Hace pocos días, la diputada concedió una entrevista en la que se vanaglorió de
lo reivindicativa y revolucionaria que era tras haber leído La casa de Bernarda Alba de Federico
García Lorca, uno de los mejores “magos de las palabras” que tenemos en la
historia de nuestro planeta. Yo he de admitir que al cuarteto de cuerda del PP
conformado por Maroto, Levy, Casado y Semper, le tengo bastante inquina. No
puedo remediarlo ya lo sabréis si leéis este blog asiduamente. Cada vez que lxs
susodichxs hablan: mis globos oculares comienzan a dar giros estupendos de 360
grados dentro de sus respectivas órbitas. Es algo que trasciende mi voluntad, ¡como
mi amor por los helados de vainilla o mi fascinación por los bosques en los
días lluviosos! Y lo intento ¡que no se diga! Pero como soy todo odio y bilis
permitidme regocijarme en mi masoquismo informativo y compartid conmigo este
momento de éxtasis incoherente patrocinado por Andrea Levy: izquierdista
radical en sus tiempos libres.
Hubiera admitido
los gustos de Andrea Levy por Sánchez Dragó, Arturo Pérez Reverte o incluso
Llorenç Villalonga (este último no creo, ya que, ¡algunas! de sus obras fueron
escritas originalmente en, ¡oh! català), sin embargo confieso que me sorprendió
que Andrea Levy y yo compartiésemos gustos ¡Que escándalo! ¡No por favor! ¿Yo
parecerme en algo a Levy? ¡Si me produce urticaria y angioedema oírle! ¿Tendré
yo el problema? Y tras mucho pensar y repensar acabé admitiendo que el problema
era compartido: tanto yo como yo mismo teníamos la culpa de todo.
Reconozcámoslo las personas respiramos, y a muchas nos gusta Lorca. Así que
nada Levy, encantado de tener gustos en común contigo… Ya podría perfectamente terminar
el artículo aquí, pero seamos sincerxs: ¡lo que nos gusta un buen critiqueo! Así
que, ¡manos a la obra!
Cuando unx
disfruta de la literatura lo razonable es interesarse por la persona que nos
está permitiendo viajar a su mundo, a su yo más íntimo. García Lorca es uno de
esos poetas que nos hace estar orgullosxs de ser seres humanos, y Andrea Levy
como humana, sabe apreciar al poeta y dramaturgo (además de disfrutar con su
lectura, claro). Aunque me temo la diputada se olvidó de la historia de Lorca.
Se olvidó de su labor, junto a su compañía teatral, encomiable por colaborar en
hacer llegar el teatro y las plurales artes a los diferentes pueblos de España;
el partido de la política Levy se olvidó de los Sonetos del amor oscuro, de los poemas a la muerte o de su amistosa
y alegre canción a los mariquitas; Levy
se olvidó de reivindicar a Antonio Machado en su El crimen fue en Granada: a Federico García Lorca; ocultó una
verdad archiconocida: al poeta lo mataron por homosexual, rojo, republicano y
masón. Y no lo mató el viento, no lo mató la lluvia o el frío, tampoco fue el
hambre, no. A Lorca lo mataron quiénes fundarían su partido años después. Sí
Levy, siento decírtelo, tú partido fue fundado por el fascismo, por el franquismo.
¿Qué más dará?,
¿no Andrea Levy? ¿Eso no fue hace milenios? ¡Es cosa de rojxs que nos gusta
reabrir heridas! No Levy, no. Aunque tu estrategia y la de tu partido sea la de
la amnesia histórica colectiva nosotrxs estamos servidxs de memoria. No es cosa
de izquierdistas, no es cosa de viejxs, no es cosa de extremistas, no es cosa
de Maduro, no. Me encanta que te fascine la obra de Lorca Levy, ¡no sé si habrá
quedado claro! Mas ojalá que también le gustase a ti y a tu partido la
historia, ojalá tú y el partido a la que estas adscrita condenarais al los
criminales franquistas que formaron tu partido, ojalá pudieras llorar la muerte
de Lorca como lo hizo Machado, o de la manera que lo hacemos tantxs, ojalá
Levy, ojalá… Siento que tu ideología no te lo permita, siento muchísimo que
tengas que sacrificar la coherencia política para enfadarte con Bernarda Alba y
su intransigencia de la que ni ella es culpable, siento que tengas que ser
incoherente cuando lloras la muerte de Adela, siento que tengas que llevar la
incoherencia como bandera cada vez que no soportas a los que todavía
considerarían a las mujeres como mercancía de cambio, como criticaba ya Lorca
en la obra que tan reivindicativa te ha hecho, lo siento Andrea Levy. Pero hay
esperanza Levy, tiene que quedarnos eso.
No debemos
enfadarnos por los gustos de Levy, debemos apenarnos por ella y su partido por
llevar la incoherencia a niveles tan tristes… Pero también debemos alegrarnos
¡El arte de Lorca ha ganado! Lorca venció a sus asesinos, sus poemas, sus
obras, han transcendido y han superado las balas que le mataron. Su arte ha
sido capaz de conmocionar a aquellxs que rehusan de la memoria histórica. No
nos debe asustar, a lxs que tenemos memoria, que Andrea Levy disfrute de la
obra de Lorca sin condenar con su coherencia política a sus asesinos. Ella
sabrá encontrar en las palabras del poeta a la tolerancia, el perdón, al
feminismo, la igualdad, la alegría y la verde rebeldía. Es cuestión de tiempo
que Levy encabece las manifestaciones por la recuperación de la memoria
histórica. Sí sonará descabellado, sí seguro que será neoliberal, pero desde
luego para mí será una compañera demócrata. Y entonces nos alegraremos por ella
y su partido, como nos alegramos ahora de su gusto por el reivindicativo y
revolucionario poeta eterno.