18/03/2012

M!edo & Terror

Podríamos calificar al miedo como un sentimiento, que nos produce escalofríos, debido a unas sustancias químicas, subida de la tensión, método inconsciente para ponernos alerta… Pero ¿a qué se le tiene miedo? Básicamente a algo muy novedoso, radicalmente diferente, a situaciones que no controlamos, en resumidas cuentas en momentos dónde no nos sentimos completamente seguros, o no tenemos el control de la situación. No es un sentimiento malo, es como la sensación de dolor, es decir, es un método corporal de estar preparado para cualquier cosa. No obstante, que ocurriría si esta sensación está constantemente activa en nuestro ser, pues algo muy sencillo a la vez que dañino, que el miedo instintivo se transforma en el problemático terror.


Tenemos un miedo inicial a la oscuridad, pero en el momento en el que agudizamos otros sentidos como el tacto o el oído, perdemos ese miedo y “bajamos la guardia levemente”, ya nos encontramos seguros. Sentimos terror cuando, sucede un acontecimiento muchas veces, y no podemos fácilmente superarlo. Un ejemplo muy claro es el del acoso escolar verbal y/o físico, porque la persona acosada suele ser tímida, pacífica… y prefiere evitar la situación que seguir el juego a unos sinvergüenzas amorales que ni reconocen lo que es piedad natural ni lo harán en sus “divertidas” vidas, con lo cual la persona acosada sentirá terror ante los acosadores hasta que llegue el momento en que no permita que unos infelices le maltraten ni le amarguen la vida.

A parte de estos sentimientos no tan homólogos como parecían inicialmente, también encontramos la fobia, a la que basándome en mi propia experiencia divido en diagnosticada y en irracional. En primer lugar, la fobia diagnosticada es la que se siente por ciertos animales venenosos o por encontrarse en lugares incontrolables, a causa de un déficit sensorial corpóreo, claras muestras de fobia diagnosticada son el vértigo, la claustrofobia o incluso la aracnofobia. Por otra parte nos encontramos con las fobias irracionales que podrían calificarse también incluso más correctamente como odio. Son fobias que no poseen sentido alguno, y que son referidas a las personas por ser, según éstas diferentes de lo normal (claro que quién es normal…) y claros ejemplos son la xenofobia, homofobia, o la discapacitado-fobia, dónde como he enunciado previamente una persona odia y no soporta a otra persona y que incluso no la considera persona. Obviamente, claros precedentes de esta, en mi opinión anomalía son a ignorancia y la insensatez.


Me despido ya, dando un consejo a las personas que sienten terror, como yo he sentido, pedid ayuda a una persona a la que consideréis amiga, buena, o un familiar o autoridad, os servirá de mucho puesto que nadie es perfecto, y todos necesitamos ayuda de los demás. Además cabe destacar que seréis muy valientes por hacerlo y os ayudará a madurar y a ser mejores personas. Por otro parte, las personas que padecen algún tipo de fobia irracional, yo personalmente les diría que toda persona posee una misma dignidad por el hecho de ser humano, y que es inquebrantable, a parte de ser una de las características comunes a todo ser humano o persona, junto con el nacimiento, la muerte y el ansia de lograr la felicidad.
   

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