Esto, como no, es escribir por no callar. Y es que, aunque
yo sea demasiado joven para tener hijxs, no sé con 22 años y ni la carrera de
medicina finalizada, uno tiene amigxs que… pues… van a tener unx hijx, con lo
cual, evidentemente hablamos del retoño de vez en cuando. Entonces, por unas
razones u otras, sale el tema de: ¿Y si me sale homosexual? ¿Y si es niña? Tú
en ese momento te quedas patidifuso ¡¿Y qué les digo yo ahora?! Sin embargo, de
nuevo, te vas dando cuenta que como tú, solamente están hablando por no callar.
Mas no digáis que no es un fenómeno frecuente, el famoso “quiero que el primogénito
sea niño”, “no te ofendas, pero nadie quiere que su hijx nazca homosexual o
transexual”… Y hombre, que esto te lo diga unx amigx, pues duele un poco, luego
se disculpan ¡claro está! aunque el planteamiento está hecho, si nace como
favorito del cis-heteropatriarcado, pues mejor. Ya sabéis, la incertidumbre que
dan estas cosas, con lo de que salga blanco o negro no hay tanto problema, eso
tú, como amigo, lo sabes…
Esto que os estoy contando es de verdad, amigxs de lo más
tolerantes e incluyentes que hay y te dicen estas cosas, calcado de aquella
horrorosa película: La joya de la familia. No sé, no estoy en sus mentes pero, ¿qué más
dará que el bebé sea niño o niña? Sí claro, si es varón va a tener privilegios
que no poseería de ser mujer, pero para eso tenemos el feminismo. De nuevo, ¿qué
importará si le gustan los chicos, las chicas, ambos…? ¿O si se siente más
masculinx o más femeninx? ¡Es vuestrx hijx! ¡Lo tenéis que querer igual sea
como sea! Y bien es cierto que lo hacen, tendríais que verlxs ahora con su hija
¡lo contentos que están!
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| Y recordad lo visto en: memesfeministas.wordpress.com |
Alegando el hecho comúnmente objetivo de que padres y madres
solo desean lo mejor a sus hijxs, podríamos caer en la falacia de que como el
cis-heteropatriarcado quiere al hombre blanco, heterosexual, cisgénero… no es
descabellado desear un hijo blanco, heterosexual y cisgénero. ¿Tremendo verdad?
No pasa nada ¡solo se trata de una falacia experimental! Ya que luego pensamos
dos veces y nos damos cuenta de que quizá, si llevásemos ese planteamiento al
extremo, lo mejor sería no tener hijxs, no procrear, total, lo más probable es
que tu hijx salga mujer u homosexual o asexual o transexual (o todo a la vez o
conotra identidad GSRDI). Lo que ocurre de nuevo es que es un sinsentido.
No obstante, no desistes en tu búsqueda de la verdad y
piensas por tercera vez en el dichoso temita acercándote un poco más a la
dolorosa verdad, mediante siempre el buen uso de tu correcto pensamiento
crítico ¡Eureka! Quizás lo que ocurre es que debo procrear (¡Qué antiguo suena
eso!), sí, pero también contribuir, poner mi granito de arena, para que se
extinga el cis-heteropatriarcado ¡Exacto! Por lo tanto haces un acto sumamente
político, y es el acto de la “indiferencia igualitaria”, golpeando la mesa con
el puño y afirmando aquello tan bonito de: “¡Me da igual cómo sea mi hijx, le
voy a querer igual (siempre y cuando respete los DDHH que tú supuestamente le
habrás enseñado…)!”. Y ¡oye! ¡Quedas más chulx que un ocho!
Bien, aclarado todo, finalizo con aquello tan bonito de que el
amor es ciego ¿o era la justicia? En fin, solo sé que si queremos un mudo justo
no tenemos que juzgar incluso al que todavía no ha nacido, si queremos ese
mundo más justo tenemos que empezar por nosotrxs mismxs, como decía Descartes ¡oye!
Sí, por supuesto que si vuestro retoño nace mujer, transgénero u homosexual o
bisexual, no va a tener los mismos privilegios que tendría si no fuera de esta
manera, pero dentro del “quiero lo mejor para mis hijxs”, entra precisamente el
despreciar y rechazar los privilegios, porque donde hay privilegios, alguien ha
perdido sus derechos. Y además ahí debes estar tú, padre o madre, para enseñar
a tu hijx a respetar y luchar por la igualdad o renunciar a sus privilegios si
es que los posee. Y cambiando drásticamente de tema, se me queda el artículo
corto y conciso, así que acabo ya sí de verdad diciendo que estxs amigxs que he
citado estaban hablando en un contexto muy preciso, pero como no es la primera
vez que escucho esos comentarios, me ha gustado darles un pequeño análisis, no
sé, creo que es un tema un tanto tabú, y ya sabéis que yo con los tabúes no me
llevo muy bien… Al menos no a menudo… ¡¿Qué sé yo?¡ Ya desvarío…
